sábado, 25 de julio de 2009

¿Qué es la Biodanza?





Su nombre deriva del prefijo griego “bio” (vida) y el término de origen francés “danza” (movimiento expresivo). De la unión de éstos dos términos nace el termino “DANZA DE LA VIDA”.

BIODANZA esta pensada para despertar, dirigir y hacer más dinámica la energía vital que todos tenemos. La Danza entendida como movimiento integrado, expresivo, libre, creativo y por tanto personal. Su creador, el Psicólogo, Antropólogo y Filósofo, Rolando Toro, 40 años atrás, baso sus estudios antropológicos en las ciencias biológicas, en la etología y en la neurofisiología. Se trata de un sistema integral de ejercicios que deberíamos considerar una prevención global contra el estrés, por medio de movimientos integrados (danzas) y de la música.
No se requiere de palabras ni de explicaciones particulares, porque actúa directamente sobre las emociones, más allá de cualquier cultura e ideología. Podemos decir que Biodanza tuvo como antecedente directo las experiencias de Rolando Toro en educación, su énfasis está en la reestructuración afectiva de las personas y en el Principio Biocéntrico.A través de las danzas, son evocadas emociones que provocan espontáneamente, la producción de hormonas capaces de estimular el sistema neurovegetativo y promover en el organismo la capacidad de autorregulación, muy a menudo comprometida por el estrés.
BIODANZA trabaja en las cosas positivas que hay en cada uno, resalta las cualidades, hace hincapié en lo que somos, en lo que tenemos. La emoción que emerge durante los ejercicios es el instinto, transformado en el “aquí y ahora” en autoafirmación. Se siente la propia fuerza, se obtiene una mayor autoconciencia, se descubre el potencial que cada uno tiene oculto, mejorando las relaciones interpersonales. No hay contraindicaciones para hacer BIODANZA, ni es necesario saber bailar y cualquier edad es propicia para el comienzo.

“El primer conocimiento del mundo, anterior a la palabra, es el conocimiento del movimiento. La danza es “la expresión de la unidad orgánica del hombre con el universo”. Rolando Toro.
La propuesta no consiste sólo en danzar, sino en activar, mediante ciertas danzas, potenciales afectivos y de comunicación que conecten a cada persona con sí misma, con sus semejantes y con la naturaleza.

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